A E. Padilla
Uno con el cigarro en la oreja
el otro
lo baila lento
con los dedos.
Caminan
apenas hablan.
-Quizá sepa demasiado-
piensan ambos.
Se detienen
y esperan el camión.
Aún no encienden el tabaco
lo muestran como joyería sin brillo.
Han olvidado el fuego
y ya no se ven las caras
los buitres picaran sus cuerpos.
Reyes Rojas
No hay comentarios:
Publicar un comentario