sábado, 31 de octubre de 2009

La libertad más allá de la necesidad

Hace unos días sostuve una calurosa discusión con un obstinado pero querido amigo mió sobre distintos temas, entre los que sobresalió el asunto de la libertad humana. Así que quiero aprovechar esta ocasión para hacer una breve reflexión –a modo de réplica- sobre este controvertido tema, abordándole desde un punto de vista esencialmente político y, al mismo tiempo, desde el enfoque tradicional y habitualmente aceptado por corrientes diversas.

Libertad de credo, libertad de prensa, libertad civil, libre determinación, son solo algunas de las garantías individuales que las constituciones expresan. Empero –sin afán de demeritar las importantes conquistas en materia de libertad y derechos humanos-, en las últimas décadas hemos advertido una alarmante incapacidad de los gobiernos para cumplir satisfactoriamente los principios de libertad que proclaman, y más aun, aquellos que no reconocen pero que la sociedad demanda.

¿Cuál es la causa de esta inconsistencia? ¿Por qué razón los criterios de libertad carecen de efectividad en la realidad?

Dos respuestas, una misma interpretación.

Uno. Si bien el perfeccionamiento de los medios técnicos ha creado las condiciones necesarias para la superación de la escasez, lo cierto es que la sociedad humana, paradójicamente, aún no supera la necesidad. Mientras la gratificación universal de las necesidades elementales no se realice, individuos y comunidades enteras se mantendrán sujetos a la lucha por la supervivencia. Para ser libre es preciso vivir, no permanecer en estado de conservación perpetua. El hombre es libre cuando la necesidad se disuelve, no antes. Para los que dicen lo contrario (una vasta mayoría), habría que indicarles que –en el actual sistema social- el bienestar de uno presupone la penuria del otro. ¡Eso no es libertad, curtido lector! Es más, si aplicamos un mayor rigor a nuestra observación, podremos señalar que la libertad comienza allí donde el trabajo necesario culmina. Y cuando una sociedad consume la mayor parte de su energía trabajando forzadamente, es decir, en virtud de solventar sus gastos primarios, el ejercicio de la libertad se ve irreparablemente mermado. Es evidente, por lo anterior, que la libertad esta sujeta a condición política.

Dos. En una sociedad jerarquizada, el cumplimiento de las libertades esta condicionado por el poder adquisitivo de los sujetos. Una vez que los Estados renunciaron formalmente (nunca fue su función o esencia real) a la misión de procurar el bienestar social y la prosperidad pública, la distribución de la riqueza social paso a ser prerrogativa exclusiva de los mercados. Así, el ejercicio y la concesión de las libertades individuales quedó –a lo mucho- en manos de los beneficiarios del orden económico. El resto, permaneció en el terreno de la necesidad, es decir, en un campo de ausencia de libertad. Para estos últimos, las garantías y libertades constitucionales son, en el mejor de los casos, palabras huecas, compromisos omitidos, charlatanería liberal, anhelos quiméricos.

Un hombre auténticamente libre es aquel que satisface los dos polos de su existencia: la biológica y la existencial. En nuestra era, las instituciones no son capaces siquiera de garantizar la subsistencia de los individuos. ¿Cómo es que las constituciones se comprometen a conceder libertades varias, cuando el más elemental de los derechos humanos, aquel del abastecimiento y satisfacción de las necesidades básicas, no se cumple?

La libertad no esta dentro, sino fuera de la lucha por la existencia: la necesidad y la escasez inducidas constriñen el auténtico libre albedrío de los individuos.

Empero, este no es un problema de ética o de moral. (Bien dice un aguerrido colega que “la moral no es otra cosa que un árbol que da moras”). Es, esencialmente, un problema político.

La libertad y la liberación, así como el derecho a la supervivencia, la dignidad y la integridad, son necesidades orgánicas de hombres y mujeres, y no meros preceptos éticos/morales. Así que mientras no se les considere como tales (necesidades), la agresión y la violación de derechos fundamentales en gran escala no se podrán frenar nunca.

jueves, 29 de octubre de 2009

Pensamiento y acción, dos caras de la misma moneda.

El sentimiento de angustia y desesperación de la población de nuestro país, generado por la debacle económica y las políticas depredadoras de nuestros gobernantes, está convenciendo a mucha gente de la necesidad de intervenir, de salir a la calle para defenderse y sobrevivir. Desde que llegaron los panistas al poder en el año 2000, la máscara del estado, que procuraba ocultar su estrecha relación con los dueños del dinero vía políticas clientelares y corporativas, se ha desvanecido, mostrando su verdadera naturaleza frente a todo el que quiera verla.

En efecto, cuando Vicente Fox inició su sexenio afirmando que su gobierno era de empresarios y para empresarios, amplios sectores de la ciudadanía empezaron a identificar a la maquinaria estatal como el principal aliado del capital garantizándole amplios margen de utilidad a costa de la pauperización de la vida de las mayorías. A lo largo de estos últimos diez años, las acciones gubernamentales, entre las que se distinguen el caso de Atenco, el de Oaxaca y ahora el del SME no dejaron lugar para pensar que Fox estaba bromeando.

En este contexto, uno se pregunta ¿Qué hacer? A riesgo de parecer inocente o iluso propongo simple y sencillamente una cosa: pensar. Como dice Santiago López Petit: “El pensamiento no sirve para luchar, sino que él mismo es lucha.” ¡Cuánta razón tiene el catedrático español! Y es que normalmente se identifica a la acción de pensar como un acto pasivo, a diferencia de la acción material, que es el acto activo por excelencia. ¡Deja de estar pensando y actúa! parece decirnos el sentido común.

Sin embargo, el pensamiento es fundamental, no sólo para darle un sentido a la acción sino una dirección, un objetivo. Así, el pensamiento nos obliga primero a pensar en contra del propio acto de pensar, criticando las ideas dominantes, que nos impiden actuar en libertad; pero también es definir una estrategia, diseñar un horizonte de destino.

Por lo tanto, es necesario incentivar el pensamiento y verlo como la acción por excelencia y no como un acto de cobardía o simple escepticismo. En la medida en que lo hagamos estaremos enfrentándonos a los problemas que nos acosan y de paso seremos más resistentes a la demagogia y el cinismo típico de nuestros gobernantes. Y créanme será tanto o más importante que cualquier acción directa. No en balde los medios de comunicación han cobrado gran importancia en el mantenimiento de la dominación. Su misión radica en bloquear el pensamiento, oscureciendo y manipulando la información.

Termino entonces volviendo a citar a López Petit, quien afirma “No es suficiente afirmar que tenemos que atacar la realidad, debemos dotarnos de las armas y de las estrategias para poder hacerlo." www.rebelion.org/noticia.php?id=94024

miércoles, 28 de octubre de 2009

¿Clásico?

Después del vergonzoso espectáculo futbolístico (si es que se le puede llamar espectáculo) que nos ofrecieron los “importantísimos” equipos mexicanos Chivas y América, me surge un pequeño prurito intelectual, que tiene que ver precisamente con la denominación de “clásico”, que siempre se le da al encuentro de estas dos escuadras. Veamos.

Según las definiciones de la Real Academia de la lengua española, la palabra “clásico” denota ante todo, plenitud e importancia, lo cual quiere decir que todo aquello que ha sido categorizado bajo este adjetivo es algo valorado como perteneciente a un periodo de esplendor, como algo que marca un referente que puede servir de paradigma o arquetipo para la posteridad, por lo tanto, es algo que tiene trascendencia histórica. Ejemplo de esto lo podemos encontrar en grandes obras de la literatura Griega, la pintura renacentista y la música del Barroco.

Habiendo hecho estas pequeñas aclaraciones, cabe preguntarnos cuál es la importancia y trascendencia que han marcado los equipos de Chivas y América en el futbol Mexicano actual. Chequemos algunos números.

En los últimos 20 años el equipo jalisciense solo ha podido obtener 2 títulos, uno en el torneo de verano de 1997 y el último en el torneo de apertura del 2006. Por su parte, el América tiene también la pobre cantidad de 2 torneos ganados, Verano 2002 y Clausura 2005.

A pesar de que ambas escuadras han tenido periodos esplendorosos (no podemos olvidar que el Guadalajara es el equipo con mayor número de títulos en el futbol mexicano), hace mucho tiempo que no figuran como potencias del Balompié mexicano. Si en algún momento los encuentros entre estos equipos fueron batallas épicas que dejaron su huella en la historia de nuestro fut-bol, hay que reconocer que esos tiempos se han ido.

El desempeño futbolístico del torneo mexicano sigue aun dejando mucho que desear, su desarrollo escaso lo mantiene en un nivel de poca espectacularidad, más allá de la que desesperadamente las cadenas televisivas tratan de inyectarle, supliendo el vacio de futbolístico con tecnologías de video inútiles, que si bien apantallan al teleauditorio, no sirven para nada.

Por otra parte, la escasa capacidad de crítica por parte de los locutores y comentaristas se empeña en generar una visión retórica y falsa de lo que el mismo espectador mira en un partido, se insiste en crear una parafernalia televisiva alrededor de un partido insignificante, en el cual lo que predomina es la apatía y la mediocridad de los futbolistas.

¿Llamar Clásico a un encuentro de dos equipos del montón, conformados por jugadores del montón? ¡Ni América ni Chivas son un referente del Fut-bol actual! Señores comunicadores: más respeto a los equipos que si son protagonistas y sobre todo más respeto al público.

lunes, 26 de octubre de 2009

Desde Brasil

Tal parece que al presidente brasileño le ha agradado la ocurrencia de su símil mexicano: es hora de combatir el narcotráfico y la delincuencia organizada de manera frontal. Es decir, sacar a la policía y al ejército a las calles, poco importa que los únicos resultados sean decenas de muertos (miles en el caso mexicano) y una sensación de inseguridad que va en aumento para el resto de la población.

El fin de semana pasado, combates entre narcotraficantes dejaron un saldo de 21 muertos, a lo que Luiz Inacio Lula da Silva reacciono afirmando que “es necesario limpiar la suciedad que esta gente impone a Brasil”.

Para dicho combate se han dispuesto ya de 40 millones de euros, y se habla ya sobre la posibilidad de solicitar un préstamo a los Estados Unidos, siempre tan dispuestos a cooperar en cuestiones de seguridad nacional (sabrá Dios por qué).

Las autoridades brasileñas no harían mal en echar un vistazo al caso mexicano: lo contraproducente que ha demostrado ser el combate al narcotráfico en términos de vidas humanas y pérdidas económicas (¿qué es más importante?) antes de emprender una cruzada en contra de seres humanos que viven en condiciones de extrema pobreza, y que han encontrado en la delincuencia una forma de sobrevivir.

En Rio de Janeiro existen casi mil favelas, mismas que en su mayoría no cuentan ni siquiera con los servicios básicos: redes sanitarias, eléctricas, de teléfonos, de agua potable. Las tazas de analfabetismo dentro de las favelas son superiores al 20%. La mayoría de las casas están construidas con materiales de deshecho y piso de tierra. La línea de pobreza es un punto ya para los cerca de dos millones de brasileños que habitan estas zonas.

Y ahora de buenas a primeras Lula se propone limpiar las favelas. Y obviamente no se trata de limpiarlas otorgándoles una vivienda digna a cada familia. No se trata de limpiarlas ofreciendo mejores condiciones de vida, mejores escuelas, mejores servicios de salud, mejor sanidad.

No, se trata de “acabar con la delincuencia organizada”, aunque sea a punta de pistola.

Lula es presidente desde 2003 y hasta el año que viene. Sus políticas han sido caracterizadas por el más alto grado de pragmatismo: como líder de la única potencia emergente de Sudamérica, se ha permitido jugar para ambos bandos: coquetea tanto con Chávez como con Obama. Ha ofrecido su apoyo al Movimiento de Trabajadores Rurales Sin Tierra, mientras que en Brasil el 40% de las tierras pertenece al 2% de la población. Lo mismo se para en un Foro Social Mundial defendiendo las causas de los movimientos sociales que en las reuniones del G-20 para estrechar manos con los líderes del mundo.

Brasil en el 2007, al organizar los Juegos Panamericanos, aumento la represión policial en nombre de la higiene social. Rio de Janeiro fue elegida sede de los Juegos Olímpicos de 2016. La última vez que dichos juegos se celebraron en el continente latinoamericano, el gobierno del país sede tuvo a bien organizar una serie de represiones a diversos movimientos con tal de tener en paz a la nación para recibir a las delegaciones internacionales (con todo el dinero que estas representan). El año fue 1968. Y tal parece que la historia se repite.

sábado, 24 de octubre de 2009

Las oligarquías se premian si mismas


Ni modo el porro mayor, perdón el rector mayor, fue a recibir el premio que la monarquía española le da a las buenas causas, en esta ocasión a la UNAM. Pero ¿a quien le dan realmente el premio? A los estudiantes y profesores o a la burocracia universitaria corrupta, representada magnificamente por su jefe máximo y dueño de la Universidad Nacional. ¿Cual es el significado de este premio? ¿Servirá para que el gobierno federal y los ciudadanos empanizados respeten a la UNAM en lugar de estar siempre atacándola; o para que mejoren el presupuesto y las condiciones de la comunidad universitaria? No creo, es más bien para fortalecer a la burocracia universitaria y afianzarla en el poder dentro de la UNAM y de paso joder a todos los que afirmaron durante la huelga del 99 que la UNAM estaba acabada y que no cumplía con sus fines. Asi las cosas, todo el mundo se congratula por el premio pero nadie se pone a pensar a quien le sirve y para que. Los premios y reconocimientos no revelan sino ocultan la problemática de la UNAM. En lugar de darle premios habría que democratizar a la institución. Hay que acabar con el poder de la burocracia universitaria y la verdad, estos premios no ayudan para tal fin sino mas bien estorban. Pero bueno, les dejo la foto que publicó La Jornada en primera plana de hoy para que quede claro que es un premio de una oligarquía hacia otra: las dos viejas, calvas y claro, muy bien vestidas. Y los jóvenes estudiantes brillan por su ausencia.

viernes, 23 de octubre de 2009

La propiedad privada

"Lárguese de aquí señora. Le he advertido miles de veces que no le quiero ver por este rumbo. No tiene permiso ni del gobierno ni de los dueños de este negocio para colocar su mugre changarro frente a este intachable local. Esto es propiedad privada. Así que mas vale que respete.” Estas fueron las palabras del solícito gerente de una pizzería de la ciudad, que con todo su legítimo derecho (pues todo aquello que es legal es legítimo) expulsó a escobazos a una humilde señora que había instalado en los márgenes del mencionado establecimiento su puestecito de tortillas y nopales.

En otro caso similar, pero que felizmente fue captado por el lente de la prensa, un iracundo restaurantero de vasto prestigio en la ciudad, con escoba en mano, amenazó con apalear el negocio ambulante de una indefensa mujer. La señora –sin ánimo de importunar a nadie- había colocado sobre la pared del establecimiento un tablero donde se hallaban ciertas piezas artesanales en venta que había confeccionado ella misma. El problema era, según el irascible propietario, que aquel tablón alcanzaba a tapar una esquina del enorme ventanal del negocio. Sin dar oportunidad a la señora de defender su posición, el colérico hombre, desde el interior del restaurante, golpeó con ánimo desmedido aquel tablero hasta derribarlo y estropearle las piezas a la mujer. Al final de aquella penosa escena, el chef de renombre internacional se dio el lujo de lanzar una última advertencia: “Mas vale que no vuelvas a poner tus chingaderas aquí. A la próxima le llamo a la policía. Esta es mi propiedad [privada]. Aprende a respetar.”

En otra ocasión, en uno de esos callejones donde se dan cita todos los jóvenes “cool” de lunes a domingo por la noche, un joven indígena de humilde apariencia decidió acercarse a pedir una moneda a un grupo de muchachos “cool” que se encontraban sentados en la terraza de un conocido bar. Al ver que ninguno volteaba siquiera a verle, optó por dirigirse a una de las mesas que se hallaba al interior del establecimiento. Aún no llegaba a su destino cuando de pronto un señor vestido de amarillo, aparentemente al cuidado de los clientes “cool”, le tomó enérgicamente por el brazo, y a codazos y empellones le arrojó del lugar. Ninguno de los clientes se percató siquiera del incidente. No satisfecho con haberle expulsado abruptamente, el valeroso titán de la seguridad correteó al humilde hombre por todo el callejón lanzando, uno tras otro, epítetos tales como: “Necio cabrón,” “Jijo de la chingada”. Una vez que el desarrapado joven se hallaba a varios metros de distancia, el corpulento agresor pronunció –a modo de reprensión- las siguientes palabras: “A ver si ya entiendes que por aquí no puedes transitar. No entiendes pendejo que esto es propiedad privada.”

El artículo 1º constitucional establece lo siguiente: “Queda prohibida toda discriminación motivada por origen étnico o nacional, el género, la edad, las capacidades diferentes, la condición social, las condiciones de salud, la religión, las opiniones, las preferencias, el estado civil o cualquier otra que atente contra la dignidad humana y tenga por objeto anular o menoscabar los derechos y libertades de las personas.”

A mi entender, habría que añadirle a este último apartado lo siguiente: “Sólo en caso de que se atente contra la propiedad privada, atribución divina y suprema de unos cuantos, entonces, en tal escenario, toda discriminación motivada por las razones antes mencionadas, queda permitida, autorizada y asentida por esta inmaculada Constitución”.

Así, de este modo, dotamos de empirismo a la argumentación constitucional y legaloide.

Políticamente correcto

En esta ocasión debo confesarte, lectora amable, lector perspicaz, que he intentado comenzar algo muy serio pero las circunstancias actuales -ya saben ustedes: el calderón-gate, lo inhóspito del futuro, la falsedad y todas aquellas otras causas derivadas con la paranoia mundial de la crisis y la crisis y la crisis- vuelven evidente y burda en ocasiones a las causas mismas del problema y son sólo esos pequeños instantes los que podemos rescatar para nuestro deleite:

“Es ampliamente aceptado que la volatilidad macroeconómica, por la incertidumbre que genera, desalienta la inversión y consecuentemente el crecimiento. Los precios necesitan ser suficientemente estables para inducir una asignación eficiente de los recursos, para fomentar proyectos de inversión de largo plazo y para estimular el ahorro y la intermediación financiera”.

De repente uno se topa con joyas de la antaño famosa retórica: “A su vez, el desarrollo del sistema financiero, al permitir una canalización eficiente del ahorro a sus usos más productivos y un mejor manejo del riesgo, representa otro factor de impulso de gran importancia para el crecimiento”.

[…]

“Asimismo, recientemente se ha destacado la importancia de que los proveedores de insumos a través de redes tales como las de comunicaciones, servicios financieros y energía eléctrica, lo hagan de una forma competitiva. La naturaleza misma de este tipo de servicios, fundamentales para el proceso productivo de las empresas, provoca que, en ausencia de una regulación adecuada, surjan proveedores dominantes que ofrecen el servicio a precios más elevados y con una menor calidad. Estas distorsiones restan competitividad a las economías y, por lo tanto, afectan negativamente su potencial de crecimiento. Durante la Conferencia podremos escuchar las recomendaciones de expertos en este tema tan trascendente”.

Se refiere a la reunión que el pasado lunes y el pasado martes también tuvieron los chicagos-boys-mexicanos con los chicagos-boys-de-allá en las inmediaciones del banco central, según reportes dados a conocer en algunas secciones policíacas de varios periódicos en todo el país.

El reporte aún no se ha esclarecido. Extraoficialmente corren reportes por todos lados. Los diputados han estado tan desvelados que conocer las intenciones del gobernador (el treinta y tres del país, además de ser el único que no pasa por el escrupuloso y fundamental voto democrático) del banco central aún no está en sus apretadas agendas -comentan algunos reportes también extraoficiales.

Las palabras entre comillas corren a cuenta del gobernador del banco.

Tengamos fe y esperanza para que este problema llegue a oídos de quien puede ver a través de nuestros corazones y de nuestros pensamientos, para que amedrente moralmente -bajo los medios metafísicos y los fines mágico chamánicos que considere necesarios- a los presuntos funcionarios financieros.

Mientras tanto nosotros, lectora incansable, lector aguerrido, tratemos de ponernos serios.

miércoles, 21 de octubre de 2009

Adelgazando al Estado

De la noche a la mañana. Mientras festejábamos el heroico pase de México al mundial de fútbol, la Policía Federal tomaba las instalaciones de la empresa pública Luz y Fuerza del Centro, encargada de abastecer de electricidad a más de 20 millones de personas. (¿Por qué hubo la necesidad de involucrar elementos policiacos para cerrar una empresa perteneciente al mismo gobierno?)

Al día siguiente nos enterábamos de su liquidación, debido, al menos oficialmente, a la falta de eficiencia en el servicio y a los pasivos que venía arrastrando.

Ríos de tinta han corrido ya desde el 12 de octubre, ya sea a favor o en contra de la acción emprendida por el gobierno de Calderón.

Los que apoyan la medida acusan al SME de ser el culpable de todas las desgracias: que si la inoperatividad de la empresa se debe al contrato colectivo de los trabajadores, que si la corrupción dentro de la misma es propiciada por los mismos miembros del sindicato, etcétera.
Economía, Gobierno, La Voz de la Nación
Pregunto yo: ¿cuál es la diferencia entre el SME y cualquier otro sindicato? ¿Por qué, de repente, la luna de miel entre las agrupaciones sindicales y el gobierno se ha terminado?

¿Se trata acaso de un verdadero golpe al sindicalismo charro que tanto ha servido a las clases poderosas de nuestro país? No se por qué, pero lo dudo.

El corporativismo, mismo que se constituyó a la par del régimen priista y por ende, del México moderno, sigue tan vigente como antes. Ahí están los sindicatos de PEMEX o el SUTERM (electricistas de la Comisión Federal de Electricidad). Por supuesto, el SNTE de la maestra, quién encabeza junto al Presidente la famosa alianza por la calidad de la educación.

La corrupción existe en todos y cada uno de ellos, así como existe en mayor o igual proporción en las esferas de la administración pública. Sus líderes y todas sus fechorías son solapados por los gobiernos mientras les sean rentables política o económicamente. Gobiernos priistas, gobiernos panistas. Mientras los sindicatos, y principalmente sus líderes, sigan cooperando, el engranaje sigue funcionando.

El problema viene cuando se presenta un negocio de miles de millones de pesos (como es el caso, con la concesión de una extensa red de fibra óptica que permite ofrecer los servicios de triple play) y el sindicato se convierta en un obstáculo. Cuidado entonces, que hasta empresas desaparecen.

¿Que los trabajadores del SME gozaban de enormes privilegios? Nadie lo duda: cotizar por 30 años para poder recibir una pensión que alcance para apenas sobrevivir es un privilegio que pocos pueden tener. Preferible liquidarlos ahora a crear un problema como el del ISSSTE.

Las mafias sindicales son, en efecto, uno de los muchos problemas que enfrenta nuestro país. Sin embargo, resulta patético el intento de disfrazar un proceso de privatización diciendo que se trata de un proceso de democratización y modernización de las organizaciones obreras de nuestro país. No se trata de una advertencia a todos aquellos líderes corruptos: se trata de quitar el obstáculo inmediato de enfrente para que el dinero pueda fluir hacia unos cuantos bolsillos.

Sólo en México: mandar a la calle a 42 mil trabajadores cuando somos uno de los países más afectados por la crisis. Solo falta que quieran subir impuestos.

martes, 20 de octubre de 2009

Sobre la economía y la política en China

El análisis de la economía mundo pasa por no perder de vista la correlación de fuerzas en lo comercial, industrial y financiero. Esto obliga a mirar hacia el oriente, hacia China.
El hipervínculo lleva a un artículo de Lin Chu, profesora universitaria en EU, acerca de la economía y la política del gigante al otro lado del mundo.
Se pueden encontrar algunas claves para imaginar el futuro, en un sistema con China como su núcleo.
http://www.herramienta.com.ar/herramienta-web-2/lecciones-de-china-reflexiones-tentativas-sobre-los-treinta-anos-de-reformas-econo

viernes, 16 de octubre de 2009

Dícese del verbo decir ahí dice

“No podrá haber otras partidas secretas, fuera de las que se consideren necesarias, con ese carácter, en el mismo presupuesto; las que emplearán los secretarios por acuerdo escrito del Presidente de la República”.

Artículo 74, fracción IV, cuarto párrafo de la Constitución vigente


Las reglas, me dijo y yo le dije que no dicen nada y él dijo: pero las reglas. Y me dijo que “como consecuencia de la inconformidad hacia las empresas eléctricas, por parte de los usuarios domésticos, industriales y agrícolas, así como de la demanda creciente a favor de la nacionalización de la industria eléctrica, mediante decreto publicado en el Diario Oficial de la Federación el 24 de agosto de 1937, se expidió la Ley que crea la Comisión Federal de Electricidad, encargada de la organización y dirección de un sistema nacional de generación, transmisión y distribución de energía eléctrica, basado en principios técnicos y económicos y sin propósitos de lucro y el 11 de febrero de 1939 se expidió la Ley de la Industria Eléctrica, tendiente a regular a las empresas dedicadas a esta actividad”.

Yo le dije sí, bueno pero entonces él me dijo también que “uno de los objetivos de la nacionalización de la industria eléctrica fue consolidar, en una sola empresa, la prestación del servicio público de energía eléctrica”.

También -me dijo- “la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, reglamentaria de la adición constitucional señalada, publicada en el Diario Oficial de la Federación del 22 de diciembre de 1975, reiteró la fórmula constitucional y estableció expresamente que la prestación del servicio público de energía eléctrica que corresponde a la Nación, estaría a cargo de la Comisión Federal de Electricidad”.

Aunque -le dije- y él me dijo: “en detrimento de lo dispuesto por la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica, la prestación de los servicios por parte de la Comisión Federal de Electricidad a nivel nacional no pudo ser consumada en virtud de diversas causas extrajurídicas” me dijo.

Pero ahora dice que “las circunstancias económicas derivadas del entorno de crisis mundial, han hecho imperativa la adopción de medidas que permitan apuntalar la viabilidad económica del país mediante el uso más productivo de recursos públicos, eliminando ineficiencias que dilapidan el erario público”.

Y también dice que “a fin de hacer un mejor uso de los recursos de los ciudadanos y para garantizar a todo el país los mismos estándares de calidad en la prestación del servicio público de energía eléctrica, cumpliendo lo ordenado en la Ley del Servicio Público de Energía Eléctrica”, ha tenido a bien expedir el decreto para desaparecer Luz y Fuerza.

A ellos no les gustó lo que dijo y le dijeron que en la “Asamblea General de nuestro Sindicato, se tomo (sic) el acuerdo de no aceptar la liquidación que nos ofrece el gobierno federal, en virtud de que vamos a ejercer nuestro derecho de amparo contra el intento gubernamental de liquidarnos.

“Sabemos que la situación económica actual de nuestras familias no es la mejor, pero tendremos que resistir los embates del gobierno federal.

‘No aceptes firmar notificación alguna, solo unidos podremos ganar esta batalla’ dice Fernando Amezcua, miembro del SME.

Yo digo -le digo- que las circunstancias económicas derivadas de la decisión irán en contra de la viabilidad económica del país.

Y entonces yo digo valen las leyes, me dice y él dijo las leyes, pues le dije no valen y él dijo no valen me dice.

martes, 13 de octubre de 2009

QUIERO UN MUNDO DE CARAMELO

No cabe duda que el caos se apodera cada vez más de nuestra realidad. Los acontecimientos, que los medios de comunicación se encargan de difundir y exaltar, hacen parecer que nuestro mundo necesita algo así como un “Bastián”, héroe mítico de la bonita novela de Michael Ende “La historia sin fin”, quien es el elegido para salvar un universo fantástico, que se encuentra a punto de ser consumido por la nada, pues la gente ya no quiere creer en la fantasía.

La diferencia entre nuestro caso y "la historia sin fin", estriba en que nosotros necesitamos un héroe mítico que funcione un tanto a la inversa, puesto que no es la falta de sueños la que ha generado el caos en nuestro mundo.

Por el contrario, son los excesos fantasiosos y de ensoñación de los bien llamados, por mis camaradas y colegas de la voz del Sinchi, “emprendedores” los que se han encargado de crear esta caótica y compleja ilusión que atenta tragarse nuestra burda, cruda y tranquila cotidianidad.

Mientras el gobierno federal se encarga de terminar de destruir los pocos logros y vestigios de un aparato estatal, si usted quiere un tanto “Frankesteiniano”, los principales canales de la televisión mexicana, con su sequito de “intelectuales” y “doctos” periodistas, no se cansan de ensalzar y de proferir loas a un grupo de futbolistas mediocres, que no saben ni mandar un centro, que por que consiguieron el pase al mundial. ¡Hubiera sido el colmo que no! (Por cierto, me fascina el futbol, ¡pero por todos los Dioses! juegan peor que cualquier equipo juvenil del llano). He aquí la fantasía.

Por otro lado, “el carnal de las estrellas” ha puesto a su disposición la última y más novedosa de sus ilusiones (o debería decir alucinaciones), un tierno y romántico concurso de amor, en el cual los participantes se tienen que enamorar, (casi me hacen llorar).

Por supuesto también cuenta con una elite de consejeros del amor, los cuales orientan a los embelesados concursantes. No olvide usted también tomar nota y aprender de estos experimentadísimos amantes y consejeros, quienes por cierto, están más solos que un ostión, otro de ellos se ama tanto que ya sabe cuando se realizará su próxima cirugía plástica.

En fin, entre fantasías, profetas locos, telenovelas para todos los gustos y “reality” Shows, el mundo en su simplicidad se consume, que nos importa la crisis y el desempleo; que nos importa la realidad si es tan hermoso soñar.

El derecho a la privacidad

Mucho revuelo causó en distintos sectores de la población, la propuesta del presidente Calderón para la creación de una credencial de identificación, credencial que por donde se le busque, para nosotros resulta inútil. Que por que se crea una base de datos a la cual fácilmente ciertas personas y corporaciones pueden tener acceso y mil razones más. Por donde se le busque esto es una violación a la privacidad y la intimidad.

Es un hecho que la privacidad es un derecho que debe respetarse. Si los gobiernos de los estados han sido incapaces de respetar la intimidad de la gente, cada vez implementando más tecnología para la vigilancia, la misma sociedad civil en su conjunto tampoco ha sabido exigir para consigo misma estos derechos. Las actividades socio- culturales del ciber-espacio y el uso de la tecnología actual, lo demuestran.

Dos actividades culturales contemporáneas, que aparentemente están aisladas la una de la otra, actúan perfecta e inconcientemente en conjunción para crear este nuevo e indiscreto fenómeno. Por un lado el desenfreno del consumo, que nos lleva a la adquisición de una multiplicidad de aparatos en su mayoría inútiles, los consagrados “gadgets”, que incluyen una gama de teléfonos celulares, cámaras digitales de todo tipo etc. Por el otro lado, la creación de espacios cibernéticos, los llamados blogs de Internet, en los cuales se pueden verter todas las imágenes y videos capturados por los aparatos antes mencionados.

De tal manera, cada individuo moderno y digitalizado de nuestra sociedad esta capacitado para capturar cualquier momento e imagen de su acontecer cotidiano, y accesar a los mencionados blogs en los cuales añadirá los videos e imágenes de personas a las cuales nunca se les pidió consentimiento para aparecer en la red.
Si las credenciales e identificaciones oficiales crean bases de datos que coadyuvan y fomentan el control de la información personal, los blogs de Internet cumplen la misma función, pues para poder tener acceso a estos, se requiere una previa identificación que exige datos personales.

La tecnología puede darnos maravillosos resultados y puede ser sumamente útil, pero requiere de un uso responsable, que sobre todo respete los derechos del otro. Si no, corremos el riesgo de caer en la tan repulsiva práctica de la autovigilancia.

Entrevista a Mario Bunge


Mario Bunge: "Hay nubes negras en el horizonte"
Mario Bunge critica a casi todos. Dice que las redes virtuales son superfluas, que los economistas son enemigos del pueblo, que Heidegger era un charlatán y que vendrán guerras por los recursos. Pero apuesta por la democracia participativa, el desarrollo, la igualdad y el bien común.Por: Héctor Pavón
EL ESTADO ES IMPRESCINDIBLE, dice Bunge y agrega que no puede estar sometido a unos pocos, a una minoría.

Además de físico, filósofo y epistemólogo, Mario Bunge es humanista en la teoría y en la práctica. Un hombre que reivindica la actitud liberal de quien defiende la libertad y ejercita un pensamiento progresista. Y también provocador. Polémico y con pocas pulgas: así se refiere a quienes no respeta. Bunge ha llegado a la síntesis hegeliana de su pensamiento al publicar un libro enorme en tamaño y en ideas que se llama simplemente Filosofía política (Gedisa). Desde que la Noche de los bastones largos lo expulsó del país, Bunge vive en Canadá, donde también piensa y escribe sobre este mundo, que muchas veces suele indignarlo. Una mañana, desde Montreal conversó por teléfono con Ñ y contó cómo es la democracia, la ideología, el bien común y el sistema lógico que desearía compartir con muchas personas de este planeta.

-¿Cómo opera la lógica en la política cotidiana? Usted cita frases de George Bush que no resisten el análisis lógico...

-En la política cotidiana no se trata de argumentar a favor o en contra, sino más bien de persuadir. Se usa el arte de la retórica, de la persuasión que es muy diferente de la lógica que usan los científicos. El discurso político, aun cuando sea honesto, recurre a trucos retóricos porque se trata de convencer al votante y se recurre a argumentos de tipo sentimental. En este momento, se está debatiendo en EE.UU., algo muy raro porque el debate de ideas casi no existe en ese país, acerca de los planes de Obama, de reformar el sistema de salud. Las compañías farmacéuticas, las de seguros y el Partido Republicano recurren a mentiras. Dicen que el sistema canadiense es malo cuando es al revés, es muchísimo mejor y más barato que el norteamericano; unos dicen que la socialización de la medicina equivale al comunismo y otros, al nazismo. Amenazan: mucha gente va a los mitines con armas, las exhiben y dicen que están dispuestas a defender la medicina privada con sus ¡vidas! Cuando hay grandes intereses de por medio, la retórica reemplaza a la lógica.

-Usted dice que en la política es tan común la estupidez como la racionalidad. ¿Quiénes son los que pregonan esa estupidez?

–Los malos filósofos. Como Nietzsche que no era filósofo sino panfletista: no resolvió ningún problema filosófico importante, pero sí difundió una ideología reaccionaria, proto-fascista. Los anarquistas admiraban a Nietzsche porque era anticristiano, porque peroraba en contra del establishment, y no se daban cuenta de que era antidemocrático, misógino, que estaba en contra de los sindicatos, que preconizaba la dictadura, el predominio del súper hombre. Nietzsche era el filósofo favorito de Hitler, otro: Heidegger preconizaba la estupidez, porque se reía de la lógica, negaba la racionalidad, y porque escribía de manera totalmente incomprensible. Se cree que Heidegger fue un filósofo nazi, pero eso fue un error. No era un filósofo, era un charlatán.

-En su libro elogia las redes sociales. ¿La aparición de comunidades virtuales como Facebook, ha modificado ese espíritu?

–Sí, pero son comunidades muy flojas porque los vínculos que los unen son puramente informáticos; una cosa es una relación cara a cara y otra es una relación a través de una pantalla. Yo tengo amigos postales a quienes nunca he visto en mi vida, con quienes me escribo desde hace 20, 30 años, y los considero amigos porque intercambiamos ideas, nos ayudamos mutuamente, pero en un plano muy abstracto. Las relaciones que suele hacer la gente en Internet son muy superficiales. Cuando yo era chico había otra red: la de los radioaficionados, tipos que tenían un equipo de radioemisora, retrotransmisora y receptora en un altillo y se comunicaban con gente en Australia, por ejemplo. Las conversaciones eran del tipo: "Hola, ¿qué tal?, ¿qué estás haciendo? ¿Hace lindo tiempo ahí? ¿qué comiste?" Todos temas intrascendentes. Es muy diferente de las redes profesionales, de científicos o de políticos que están tratando problemas serios, ya sea cara a cara o a través de la pantalla. La pantalla disminuye mucho la intensidad de las relaciones sociales.

-¿Usted asesoraría a un gobernante como intelectual?

-Sí, cómo no, desde luego. Pero la desgracia es que los gobernantes casi nunca consultan a los científicos; consultan a los economistas, y casi siempre a los malos. Por ejemplo, Obama, a pesar de sus buenas intenciones, está rodeado de economistas de la época de Bush o de Clinton, que son responsables de la crisis actual. Son personas que asesoraron a los gobiernos anteriores diciéndoles que había que desregular ésta o aquella industria; empezando por Ben Bernanke, que es el presidente del Banco Central, Larry Summer, que fue presidente de Harvard University. En ese entonces, Summer dio sugerencias sobre las inversiones y Harvard llegó al borde de la bancarrota. Ronald Reagan se hizo asesorar por Milton Friedman quien dio recomendaciones que hicieron que la economía norteamericana cayera en crisis. En cambio, en la gran recesión que empezó en 1929, el gobierno de Roosevelt se asesoró por discípulos de Keynes. Es decir, esa vez sí consultaron a un buen economista, uno de los pocos que no era enemigo del pueblo. La mayor parte de los economistas son enemigos del pueblo. Como dijo Nassim Nicholas Taleb: son como astrólogos pero mucho más peligrosos.

-¿Cuánto cree que se ha transformado el concepto de seguridad? Pareciera que en nombre de la seguridad hoy se resigna libertad. ¿Es un mal necesario?

-No, yo creo que no, que es al revés. Solamente en una sociedad democrática puede haber seguridad, porque la gente participa y, en lugar de esconderse en pequeños grupos subterráneos ilegales, saca la cara y combate en defensa de las libertades. Por otro lado, en la sociedad actual no hay seguridad económica, a uno lo pueden dejar cesante de la noche a la mañana. Tampoco hay seguridad ambiental; uno no puede tener seguridad de que el aire que respira o el agua que bebe están libres de contaminantes. No hay seguridad sanitaria, digamos. Hay muchas clases de seguridad. La política de Bush fue igual que la de Hitler: decirle a la gente que estaba bajo amenaza para que aguantaran cualquier cosa. Cuando en el Juicio de Nüremberg le preguntaron al mariscal Goering cómo se las arreglaron para persuadir al pueblo alemán de que tenía que seguir fielmente las órdenes del Führer, dijo: "Es muy simple, los convencimos de que estaban bajo amenaza, de que la nación alemana estaba en peligro de ser destruida de adentro por los judíos y de afuera, por los bolcheviques". Bastó eso para que aceptaran todas las medidas de emergencia. Y lo mismo pasó con el 9/11. Bush convenció, con la complicidad de los grandes medios, a la población de que EE.UU. estaba bajo ataque. Y era mentira. Eso de la guerra contra el terrorismo es ridículo, lo que requiere es una operación policial, no una movilización de todo un pueblo. Los norteamericanos estaban completa y políticamente ciegos.

-¿La idea de un bien común, se modifica cuando se multiplican los guetos? Hay guetos voluntarios de ricos, involuntarios de pobres, hay minorías sexuales, tribus urbanas, que busca cada una su bien común. ¿Quién busca el bien común...?

-Es que no son bienes comunes. El bien común existe desde el comienzo de la civilización. Justamente ésa es una de las características del comienzo de la civilización; aparece la división de clases, aparecen los ejércitos permanentes, pero también aparece un hecho nuevo: el bien común para el cual hay que imponer impuestos. Por ejemplo, las carreteras, los puentes, los templos, los graneros, las reservas de agua, etcétera, son todos bienes comunes, y la función del Estado es doble: no solamente mantener el orden social sino también administrar el bien común. Es cierto que cada grupo tiene sus intereses particulares y también es cierto que la escuela nos enseña –o nos enseñaba– que hay un bien común que hay que proteger y enriquecer; pero es muy difícil, sin democracia participativa es muy difícil convencer a la gente de que no tiene que dañar los edificios públicos, de que tiene que tratar de mejorar el alumbrado o el servicio sanitario y agruparse en sociedades vecinales, de fomento.

-¿Qué se entiende por ideología hoy? ¿Existe aún?

-Una ideología es un sistema de juicios de valor, de propuestas sobre la conducción de la política; contiene una visión de la sociedad, y datos. Lo que se puede prescindir es de una mala ideología, de una ideología fundada sobre mentiras o de una que sirve solamente a una pequeña minoría. Yo creo en las posibilidades de construir ideologías científicas, es decir, ideologías que se basen sobre los datos de las ciencias, de las distintas ciencias, en particular las ciencias sociales. Por ejemplo, que la libertad hace bien a la salud, y que la opresión daña la salud. Ese es un dato importante. También, es un dato importante saber que los chicos desnutridos no aprenden bien. Los mexicanos encontraron ya hace medio siglo que la corteza cerebral de los chicos pobres es mucho más delgada que la corteza cerebral de los chicos de familias acomodadas, por eso es que andan mal en la escuela, su cerebro funciona mal porque están hambrientos. Una ideología progresista, una ideología científica va a tener en cuenta esos datos de las ciencias médicas, de las ciencias sociales.

-¿La democracia ha cambiado lo suficiente para adaptarse al mundo de hoy...?

-Fue una gran revolución la introducción de la democracia política. Pero no basta porque no da de comer, hace falta la democracia económica, es decir, una repartición más justa de los bienes materiales, hace falta democracia biológica, o sea, igualdad de sexos, de los tres sexos; igualdad de razas también; hace falta democracia ecológica o ambiental, para evitar que los recursos naturales, que la naturaleza sean apropiados por unas pocas corporaciones que la arruinan, que la explotan en forma que no es sostenible. Yo propongo una democracia integral, que sea a la vez biológica, económica, cultural y política. En la Argentina, desde la época de Sarmiento en adelante se ha gozado de cierta democracia cultural o por lo menos educativa. La enseñanza ha sido siempre gratuita, abierta a todo el mundo. Pero lo malo es que una escuela gratuita pero pobre no sirve.

-¿Cómo imagina que será la democracia en el futuro?

-Todo depende de si los ciudadanos siguen en su mayoría apáticos, indiferentes a la política o asqueados por la política, en lugar de tratar de mejorarla. Tenemos que actuar en política, discutir y ver cuáles son los problemas que debieran abordar los partidos políticos y las agrupaciones políticas no partidarias. En cada barrio debería haber una agrupación no gubernamental que estudie los problemas del barrio, los problemas urbanos, económicos, culturales, y que sugiera soluciones, que inviten a conferencistas, que hagan trabajos sobre distintos problemas; que la ciudadanía participe activamente en la construcción, reconstrucción y modernización de las instituciones.

-¿Hacia dónde va el papel del Estado, teniendo en cuenta la importancia que tuvo en la definición de la crisis global?

-El Estado es imprescindible, pero no puede estar sometido a unas pocas empresas, no puede estar sometido a una minoría. Hay Estados más o menos neutros en que eso no pasa, por ejemplo en Suecia, Noruega, Dinamarca, Islandia, Finlandia, donde predomina el Partido Socialdemócrata. Es cierto que Berlusconi en Italia es un delincuente que los italianos estúpidamente han elegido tres veces; pero lo único que ha logrado Berlusconi es cambiar la industria de la comunicación, se ha apoderado de casi todos los medios, pero los gobiernos de Berlusconi no han cambiado la estructura social. Italia sigue siendo un país en que la mayor parte de la población es propietaria de su casa, la mayor parte de la población es de clase media y no hay ya la miseria que había hace 50 años. El Estado moderno en los países llamados de bienestar capitalista, o llamados socialistas, cumple un papel positivo, bastante positivo.

¿Es optimista o pesimista sobre el futuro de la humanidad?

-No soy pesimista ni optimista, soy realista. Creo que hay posibilidades de desarrollo progresivo, de mejorar la manera en que vive la gente, pero no estoy para nada seguro de que se realicen porque hay muchas nubes negras en el horizonte. Los recursos energéticos básicos están disminuyendo, de modo que es casi inevitable que haya nuevas guerras de petróleo. La sobrepoblación sigue siendo una nube negra; la erosión de la tierra; la contaminación del ambiente. Pero también es cierto que se dispone cada vez más de una ingeniería y de una química capaz de resolver muchos problemas. Hay posibilidades de ir adelante, y también hay posibilidades de ir atrás. Si seguimos poniendo la economía en manos de aventureros y de gente ignorante, entonces, vamos a seguir sufriendo crisis. Y con cada una de estas crisis se barren, desaparecen miles y miles de millones de bienes; y por supuesto, millones de vidas quedan arruinadas, las vidas de los desocupados. Hay maneras de ir para adelante, la cuestión es saber si los ciudadanos van a tomar interés en el futuro o van a seguir apáticos, marginados.
http://www.revistaenie.clarin.com/notas/2009/10/10/_-02014885.htm

domingo, 11 de octubre de 2009

Cuando pienso en el futuro

De lejos nos miramos
para sentir una gran guerra en las rodillas.
De lejos nos miramos
y los cerdos nos respiran sobre el cuello.
De lejos nos miramos
porque nos aprietan las correas.

Reyes Rojas

Una piedrita en el zapato. Antichrist de Lars Von Trier

Este año en Cannes, la nueva película de Lars Von Trier, Anticrhist, desató una fuerte polémica. La película protagonizada por Williem Defoe (La última tentación de Cristo, Manderlay, American Psycho) y Charlotte Gainsbourg(21 gramos, Paroles et Musique), es un ejercicio de sadismo en el que una pareja intenta superar sus miedos después de la muerte de su hijo; violencia, sexo, confusión y miedo son tres fantasmas girando alrededor de esta nueva cinta cinematográfica.

La película, filmada en Alemania y dedicada a Andrei Tarkovsky, está dividida en tres partes: grief (dolor, pena), pain (sufrimiento), y despair (desesperación). Al principio, el film nos muestra un primer plano con el nombre del director (dándose así muchísima importancia como director), seguido del título de la película; a continuación, sigue una maravillosa secuencia musicalizada con ópera: planos en blanco y negro de una habitación en la que los protagonistas aparecen haciendo el amor, mientras su hijo se tira por la ventana y muere.

La madre se sume en una tremenda depresión, algo lógico despues de perder a un hijo. William Defoe, terapeuta, quien muestra tener más temple ante la muerte de su primogénito, rompe la regla básica de la psiquiatría que prohibe tratar a seres queridos, y decide ayudar a su mujer convirtiéndola en su paciente. El tratamiento, asfixiante y opresivo, consiste en enfrentar a Charlotte Gainsburg con sus peores miedos: un bosque llamado Edén dónde tiempo atrás ella pasó un verano con su hijo para terminar su tesis sobre el asesinato de mujeres en la antigüedad. Es precisamente en ese bosque donde transcurre casi todo el resto de la película, lo que, desde que llegan al mentado lugar, se deja intuir una de esas películas de terror en la que los protagonistas, habiéndose apartado de la civilización, sueltan en volandas sus instintos más bajos. Así es, una película de terror, sádica por demás e intimista como todos los trabajos de Lars Von Trier, quién ha declarado que esta película le sirvió para superar una de sus últimas crisis emocionales.

Aunque alejada sustancialmente del Dogma, ese grito de identidad lanzado por Lars hace unos años, la película conserva los maravillosos elementos visuales tan característicos del director. A las actuaciones no les pongo un pero, apoyo totalmente la entrega del premio a Charlotte Gainsburg por mejor actriz en Cannes; de Williem hay poco que decir después de su larga carrera. Sin embargo, la linea narrativa es algo débil y a tientas predecible, pareciera que Lars Von Trier se vio obligado a incluir segmentos verdaderamente absurdos que fallan al buscar un impacto en el público, como en el que un zorro le dice literlalmente a Williem Defoe que el caos reina.

La película ha sido muy criticada por el abigarrado simbolismo (a la Tarkovsky pero sin asideros) que está presente durante toda la película, incluso, uno de los símbolos más importantes (la triada de los tres mendigos) es una falsa referencia. Entre sus innumerables guiños simbolistas (bíblicos, cabalísticos, cinematográficos, etc) nada queda sustancialmente en pie, como para que uno sienta que no le están tomando el pelo. En cuanto al tema del anticristo, es difícil precisar si Trier hace referencia a la naturaleza humana (la femenina sobre todo) como el origen de todos los males, o a su ya tan calumniada terapia que, después de todo, le ha servido como fuente de inspiración y máscara espectacular.

En Cannes, cuando le preguntaron qué fue lo que quiso decir dijo: No tengo que justificarme. Yo hago películas y ésta es fruto de la voluntad de Dios. Además, yo soy el mejor director de cine del mundo” menuda soberbia continuó hablando “No me debo a la audiencia sino a mí mismo. Hago las películas para mí. Ustedes son sólo mis invitados”. Finalmente concluyó que la película se trata “un sueño dentro de una película”.

Al parecer, Lars Von Trier está encantado con la reacción que desencadenó su película. Era de esperarse, después de todo una de sus consignas cinematográficas dicha alguna vez en una entrevista, pregonaba que “una película debe ser como una piedra en el zapato”. Si de eso se trataba todo, entonces no hay nada que reclamarle, pocos se quedan impávidos ante sexo en el bosque, ablaciones y penes sangrantes.


viernes, 9 de octubre de 2009

Tres veces te engañé

Llegaron a mi oído rumores de los cuáles no puedo dar más fe que mis propias palabras:

a) por que sería insensato de mi parte revelar la fuente de cualquier información que no lo requiera a terceros,

b) además de que trataría de evitarlo si alguna autoridad buscara mi persona para preguntarle -con rudeza o sin rudeza- quién carajos me dijo tal barbaridad y

c) finalmente, por que son ideas aún en construcción y sería de muy mala estima poner en evidencia a cualquier artista.

El caso es que, fechas más fechas menos, en el esplendor (largo esplendor debería ser) de los EEUU comenzaron a reorientar nuestros gobernantes el rumbo de la nación (de la nación mexicana, por supuesto. El patio trasero de la otra…)

Eso quiere decir que en los últimos treinta años hemos caminado hacía donde la clase política, pero sobre todo los emprendedores -que ocupan amplias ramas de operación como el sector de la transformación o de las comunicaciones o las construcciones o todo aquello que permita, con una simple transacción bancaria, hacerse dueño de tierra y agua y gente- nos han dicho.

Así nuestros bancos fueron nacionalizados por primera vez a finales de los setenta y luego cuando menos otras dos veces hasta ser vendidos al final de los noventa al mundo -al capital extranjero para ser más preciso.

Pero el engaño está en que las nacionalizaciones hicieron en verdad un país… pero para unos cuántos nada más, dividido y seco. Con rutas comerciales sólo en sectores estratégicos para el capital y el resto: penurias agrícolas, de salario e incluso, en casos muy severos, hasta de valor.

Recurrir entonces a un aparato mediático fuerte, robusto -como deberían estar los niños de este país- es una salida obligada. No se le puede andar diciendo a todo el mundo cuánto dinero tiene uno…

Y por eso la crisis.

“El panorama presenta desafíos importantes para el sistema financiero mexicano”, dice un estudio de julio pasado del Banco de México.

“El aumento de la morosidad en el crédito al consumo y el deterioro previsible de las carteras empresarial e hipotecaria, derivadas de la caída en el ritmo de actividad económica y la pérdida en el empleo, representan retos significativos.

“Por lo anterior, la economía mexicana, al igual que otras economías emergentes, se enfrenta a un contexto internacional sumamente débil en el cual los desequilibrios macroeconómicos tardarán algunos años en corregirse […]

“El objetivo es poder enfrentar de mejor manera las crisis financieras y tener una mayor capacidad para mitigar su contagio. Para ello, organismos y comités financieros internacionales han expandido su membrecía para incluir a representantes de las economías emergentes más importantes, entre ellas la mexicana”.

jueves, 8 de octubre de 2009

Socialdemocracia: Crónica de una muerte anunciada

Es claro que a lo que asistimos con el reciente rebrote de la ultraderecha en Europa y la consecuente derrota de la izquierda partidaria, es a la ruina definitiva de la socialdemocracia. Si bien es cierto que el estancamiento de la economía mundial produjo temor entre la clase trabajadora votante, en parte, por la resultante agudización de la competencia laboral, y en parte, por la amenaza que representa la población cada vez mas amplia de inmigrantes en la disputa de estos empleos, también es cierto que los partidos socialdemócratas europeos defraudaron insistentemente a su electorado.

En los últimos comicios Europeos (Jun 2009), donde se eligieron a un total de 736 eurodiputados, los conservadores del Partido Popular Europeo (PPE) afianzaron su hegemonía en el Parlamento Europeo. La otrora fuerza política dominante del Viejo Continente, la socialdemocracia, sufrió un descalabro, creo yo, insalvable.

Históricamente la socialdemocracia se caracterizó por su compromiso con los trabajadores y el cumplimiento de sus exigencias de clase. Siempre se manifestó a favor de la ampliación de los derechos laborales y las practicas redistributivas. En el espectro ideológico y en la arena política electoral se situó como un partido de centro-izquierda. Sus orígenes están íntimamente ligados al marxismo europeo “moderado”. Cosa que, por un lado, le valió para tener éxito en la política institucional, pero que por otro, le arrojará inevitablemente a la penumbra.

Si alguna vez desempeñó un papel progresista, con el tiempo la propuesta socialdemócrata demostró ser incapaz de satisfacer las necesidades de la clase obrera y de mitigar los abusos del capitalismo. Precisamente en su “moderación” llevaba la penitencia. Su planteamiento era básicamente el siguiente: erradicar la inequidad social a través de políticas redistributivas sin alterar el orden de la produccion (invariablemente capitalista); es decir, atacar el efecto sin resolver la causa.

Para colmo, después de un largo proceso de “modernización”, la izquierda partidaria y su expresión ideológica, la socialdemocracia, incorporaron estrategias de carácter explícitamente liberal a su proyecto político: privatización del patrimonio público, suspensión del gasto social, desregulación del mercado laboral. De ahí en adelante, su actuación como representante político de los obreros se redujo a la denuncia de los “excesos del liberalismo.” Y hoy, esta ambigüedad y tibieza, sumado al malestar de su otrora base electoral, le están pasando factura.

El triunfo de la ultraderecha en las recientes elecciones europeas pone de manifiesto el descontento popular hacia la alternativa socialdemócrata y la preferencia por una conducción conservadora de la actual crisis. Pues, si bien el problema en el largo plazo no se resuelve con esta opción, al menos si atenuará -se piensa- las manifestaciones mas graves de corto alcance.

La derecha recuperó terreno y conquistó el Parlamento. La extrema izquierda, para sorpresa de algunos, mejoró notablemente su porcentaje en la votación. La que salió mal librada fue la socialdemocracia. Su propuesta de cambio hoy por hoy resulta insuficiente. Su reajuste a las exigencias de un electorado cada vez más consciente y/o pragmático resulta improbable. Tristemente para los partidarios del ideario socialdemócrata, el hundimiento histórico de la ideología de la izquierda partidaria es un hecho altamente probable.

martes, 6 de octubre de 2009

A 3 meses del golpe

Chiquita Brands International Inc. es el nombre de una empresa americana, la principal comercializadora de plátanos en el vecino país. Se trata también de una de las empresas que han apoyado abiertamente el golpe de Estado perpetrado en Honduras por la poderosa oligarquía catracha, temerosa de perder todas los privilegios que el régimen existente hasta ahora (y que los golpistas pretenden conservar) les ha otorgado.

No más de 20 familias y empresas han sido identificadas como los dominadores de gran parte de la actividad económica del país centroamericano, siendo estas familias las dueñas de franquicias multinacionales. Burguer King, Dunkin’ Donuts, Pepsi Cola, Nike, Chiquita... algunas de las reconocidas marcas que han hecho ricos a determinados personajes aprovechando los raquíticos salarios que tienen que pagar, los impuestos que se pueden ahorrar y demás factores que han hecho al llamado Tercer Mundo el lugar favorito para la manufactura de productos para exportación.

Chiquita es una compañía con varios años de historia, la cuál no es precisamente limpia: bajo el nombre de United Fruits Company poseía haciendas bananeras en Colombia a principios del siglo pasado. Un regimiento armado del ejército colombiano asesino a miles de trabajadores por protestar en contra de las malas condiciones de trabajo, en la conocida Masacre de las Bananeras.

En 1985 la compañía fue acusada de sobornar al dictador hondureño Oswaldo Lopez Arellano para que autorizara una disminución del impuesto sobre la exportación de plátanos al extranjero.

Ha sido acusada de permitir el ingreso de cocaína a los Estados Unidos en sus cargamentos, así como de mantener lazos con grupos paramilitares de extrema derecha y contrainsurgencia en Colombia (por lo que tuvo que pagar 25 millones de dólares, amén de la justicia norteamericana), y por supuesto, de violaciones a los derechos humanos fundamentales de sus trabajadores.

Cuando Manuel Zelaya, depuesto presidente hondureño, anunció un aumento del 60% al salario mínimo, Chiquita fue una de las primeras compañías en protestar. Al día de hoy se mantiene una campaña internacional de boicot a los productos de la compañía, por apoyar al regimen instituido de facto en Honduras, lo que tiene singularmente preocupados a sus directivos, asustados por una disminución en sus ingresos.

El despectivo mote de repúblicas babaneras viene precisamente de la forma en la que Chiquita así como otras compañías multinacionales operan en países en vías de desarrollo. El modo de extraer los recursos de un pueblo, al mejor estilo de los gloriosos años de dominación española, para enriquecer a unos cuantos.

¿Políticas que favorezcan a los trabajadores? Por favor, si son quienes menos importan. Mejor deponer a un Presidente democráticamente electo, y tener uno a modo para realizar los cambios necesarios (o mantener las cosas como están), siempre en busca de la modernidad y el progreso, del crecimiento y la prosperidad. Aún si en el camino las mayorías tienen que sacrificarse.

3 meses van ya de movilizaciones populares masivas en Honduras. La restricción de libertades por parte del democrático régimen de facto es cada vez mayor. Probablemente la crisis política se agudizará a partir de ahora, conforme se acerca la fecha de las elecciones. Y sólo una cosa es definitiva: las circunstancias en América Latina no son las mismas de hace 20 años. Existe un mayor grado de concientización en una buena parte de la población sobre el yugo que han impuesto por siglos no sólo los gobiernos extranjeros, sino también aquellas compañías que han acumulado su riqueza explotando a los pueblos de nuestro continente.

Del cauce que tome el conflicto en Honduras dependerá mucho de lo que suceda en el corto y mediano plazo en la región, quizá la única en el mundo en la que existe una resistencia real no sólo al imperialismo norteamericano (integración regional, movimientos sociales), sino al sistema económico que impera en este mundo.

viernes, 2 de octubre de 2009

Mejor decirlo así

Vámonos dejando de bromitas que no sirven para nada. Sólo nos quitan el tiempo y todos sabemos bien que time is money. “Habrá un modelo de subsidiaridad, pero también creo que hay que tomar atribuciones, hay que hacer cosas para las cuales no estoy facultado, pero no creo que haya a mucha gente a la que le importe que las haga; me estoy tomando muchas atribuciones que tal vez no están en la Constitución (sic), pero no estoy ofendiendo a ningún mexicano, estoy tratando de ayudar a los que me eligieron y creo que voy por el camino correcto”…
Esto lo dijo Mauricio Fernández Garza, que vive en el centro disney de San Pedro Garza en Nuevo León. “Siento que el modelo mexicano está equivocado. Es un modelo enormemente paternalista, maternalista. Queremos que todo lo resuelva mamá, papá Calderón o el Ejército, pero eso no funciona en ningún país del mundo… aunque “cuenta con el apoyo de Jorge Tello Peón, asesor del Presidente (sic), así como de los hombres más ricos de Nuevo León” (la cita es del autor de la nota, Diego Enrique Osorno).
¡El primer adherente panista al constituyente de Muñoz Ledo!
La cultura emprendedora a su máxima velocidad: la destrucción de sí misma. Porque si un ayuntamiento se declara autónomo, no del presidente, sino de la constitución misma, se vuelve evidente -burdo- que el estado no sirve para nada, ni tiene ningún sentido práctico que exista, pues no puede resolver los problemas de quienes son sus jefes en lo material, en lo moral y en todo lo demás que se le tenga bien imaginar a mi querido lector, a mi dulce lectora.
“Todo este proyecto está orientado un poco a eso; va a haber cámaras en los accesos del municipio que detecten todos los carros. Cada placa queda fotografiada. Va a haber otras cosas que no te puedo decir, pero son equipos muy sofisticados. Está pensado que entre en acción un grupo rudo en tareas complicadas. Habrá que hacer lo que se tenga que hacer.
“-¿Qué significa ‘rudo’ y ‘complicado’? ¿Es un equipo SWAT (sic)?
“-No. Mejor dejalo (sic) así, como lo estoy comentando. Harán tareas de lo que tengan que hacer, pero este municipio se va a limpiar. Así tan fácil, así te lo digo”.
El municipio, célula revolucionaria…